viernes, 29 de octubre de 2010

A un día de cumplir un mes....

OOhhh!!! se me borro todo lo que había escrito!!!!! NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!

Y ahora me da flojerita reescribir, la verdad que este monstruo de computador me come las ganas de escribir, creo que lo dejare para otro día... cuando sea mas de un mes! jajajajajaja no me queda otra... creo que lo haré a la antiguita, primero escribiré en papel y luego pasare al computador.

Por el momento solo unas fotos del nuevo cuchitril, no se engañe se ve ordenado porque hice aseo hoy... Entre las cosas de el, y las mias estamos armando lo que sera lo "nuestro".

viernes, 1 de octubre de 2010

Empezando el Sábado…. En unas horas me voy...

Son las 02:00 A.M estoy muy cansada, ya estoy bañadita, pero las manos están ásperas, tanto lustramueble, polvillo y armar cajas me las dejaron para la historia…

A mi lado están mis cosas, envueltas y otro tanto de cosas “útiles” para la casa, estoy tan cansada que no logro sentir los nervios que pronosticaba para este momento, y eso que cuando llegue a mi nuevo hogar me espera el triple de trabajo.

Que puedo decir… es raro todo esto, en casa actúan mas bien como si me fuera de viaje, quizás es la forma menos triste de tomar las cosas.

Hace un rato hicimos un asado, vinieron hermana y cuñado, el salud fue por la despedida, este rato es el último que me queda jugando de local.

Siento que aún no me despido, no se que me falta ¿será un llanto descontrolado? ¿será que el nervio atacara cuando este en la cama y vea las paredes desnudas, y el estante vacío?, ¿será que no me pasará nada? No lo se…

Hoy es mi última noche en la casa que me vio crecer, dormiré por última vez al lado de la pieza de mis padres, tampoco volveré a sentarme a estas horas frente al pc en este rincón, ya nada de acá me pertenece, salvo el lote de cajas que esta a mi lado.

En unas horas mi entorno cambiará, no veré mas la cruz del cerro renca en cada despertar, no llamare al sueño mirando el techo de madera, no despertare a mitad de la noche con un libro en la cara, y tampoco me fumare un pucho columpiándome en el patio.

Todo será distinto, ya no será la rutina de vivir en la casa de mis padres, sino que comienza un nuevo ciclo, una vida en pareja, un nuevo despertar… en unas horas mas en este lugar seré la visita que se va a su propio hogar.